Imprescindible modificar dieta para mejorar la salud

  • Además de la constancia en la actividad física, es necesario cambiar hábitos alimenticios.

Ciudad de México a 4 de octubre de 2020.- Hacer ejercicio por sí mismo no tiene gran impacto sobre el peso, sobre todo, si no está acompañado por cambios en la alimentación. Lo anterior, lo evidencian estudios consultados por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad, (LabDO).

En una revisión sistemática de 43 estudios elaborada por Cochrane Library se concluyó que cuando la actividad física no se complementa con un cambio de dieta basado en un régimen nutricional personalizado, la posibilidad de disminuir en peso es mínima, mientras que combinados se obtienen más y mejores resultados (1).

La investigación identificó como el principal problema los “comportamientos de compensación”, fenómeno que los científicos traducen como el momento en el que los individuos asumen que pueden descuidar su ingesta de nutrientes críticos como el azúcar, el sodio y las grasas, por el simple hecho de efectuar una actividad física, lo cual, además de ser erróneo, puede traer consigo consecuencias en la salud (2).

Ejercicio  vs dieta

Uno de los botones de muestra que ejemplifican que hacer ejercicio por sí mismo no resuelve el problema de obesidad es que, en nuestro país, casi el 50% de la población dijo hacer ejercicio; sin embargo, el 75.2% de los mexicanos adultos lidia con las consecuencias del sobrepeso y la obesidad (3).

Aun cuando las pérdidas de peso puedan resultar modestas, el ejercicio sigue siendo uno de los mejores hábitos para cuidar la salud siempre y cuando se acompaña de una dieta balanceada en donde se evite el consumo excesivo de azúcares, grasas saturadas, sodio y grasas.

Al respecto la Organización Mundial de la Salud recomienda complementar una alimentación saludable con 150 minutos de actividad física de vigorosa a moderada por semana. Se estima que en México casi el 20% de su población no lleva a cabo ninguna actividad física, siendo los adultos mayores y los deciles más altos, los grupos con mayor riesgo (3).

Cabe destacar que en nuestro país las comorbilidades referentes a la dieta van en aumento. Según datos de la Encuesta Nacional de Salud 2018, los más recientes, 18.4% de la población padece hipertensión y 10.3% diabetes. De igual manera, casi el 20% de los mexicanos tienen colesterol y triglicéridos altos, una cifra que aumentó en 6.5 puntos porcentuales desde el 2012.

Fuentes: 

(1) Shaw KA, Gennat HC, O’Rourke P, Del Mar C. Exercise for overweight or obesity. Cochrane Database of Systematic Reviews 2006, Issue 4. Art. No.: CD003817. DOI: 10.1002/14651858.CD003817.pub3

(2) Foright, R M et al. “Is regular exercise an effective strategy for weight loss maintenance?.” Physiology & behavior vol. 188 (2018): 86-93. doi:10.1016/j.physbeh.2018.01.025

(3) Medina, Catalina et al. “Physical inactivity prevalence and trends among Mexican adults: results from the National Health and Nutrition Survey (ENSANUT) 2006 and 2012.” BMC public health vol. 13 1063. 11 Nov. 2013, doi:10.1186/1471-2458-13-1063