Se consumen más de 1,500 millones de hamburguesas en un año

  •  En México, uno de los 3 alimentos más solicitados por aplicaciones 
  •  Su consumo en exceso puede afectar la salud

En México, se consumieron más de 1,500 millones de hamburguesas durante 2023, de acuerdo a la empresa de investigación de mercados Euromonitor International, con un mercado que supera los 35 mil millones de pesos. (1)

Después de los tacos, las alitas y la comida típica, son el platillo más solicitado, principalmente en Monterrey, Guadalajara, Cd. Juárez, Mexicali, Tijuana, Culiacán, Toluca y la Ciudad de México.

Y según datos de la plataforma de entrega de alimentos Didi Food, consultados por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), su venta, solo por esta aplicación, las posicionó como uno de los tres alimentos más solicitados por las y los mexicanos, registrando aproximadamente 440 mil piezas ordenadas al mes. (2)

Por su parte, la agencia  Kantar Worldpanel destaca que los principales consumidores de hamburguesas en nuestro país son hombres; personas entre 30 y 40 años, así como familias de nivel socioeconómico medio con adolescentes y afirma que aproximadamente el 11 % de los hogares optaron en algún momento por este producto. (3)

Una sola hamburguesa sencilla, con papas, aporta hasta 1,800 calorías y éstas pueden aumentar según el tamaño, tipo de carne, de pan y sobre todo de cuántos ingredientes se le añadan. (4)

Sin duda, son un alimento muy popular, pero su consumo en exceso puede afectar la salud y causar: sobrepeso, obesidad, enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, hipertensión, hígado graso y problemas digestivos, debido a su alto contenido de grasas saturadas, grasas trans, colesterol, sodio y azúcares añadidos.

Cabe señalar que la Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere que la ingesta calórica diaria para una persona debe ser de entre 1,500 y 2,000 calorías para mujeres adultas y de 2,000 a 2,500 para hombres adultos, dependiendo de la edad, el peso, la altura y el nivel de actividad física.

Fuentes

  1. The food Tech. Innovación, pasión y tradición. https://thefoodtech.com/soluciones-y-tecnologia-alimentaria/innovacion-pasion-y-tradicion-fatburger-y-el-dia-internacional-de-la-hamburguesa/
  2. Dossier Político. 1,500 millones de hamburguesa al año. https://dossierpolitico.com/2025/05/23/1500-millones-de-hamburguesas-al-ano-comemos-los-mexicanos/#:~:text=Un%20mercado%20con%20apetito%20creciente,a%2035%2C308%20millones%20de%20pesos
  3. Kantar. Día de la hamburguesa. https://market.worldpanelbynumerator.com/mx/Noticias-/Dia-Mundial-de-la-Hamburguesa
  4. La Pepita. ¿Cuántas calorías tiene una hamburguesa? https://www.lapepitaburgerbar.com/blog/cuantas-calorias-tiene-una-hamburguesa/
    Saborearte. Hamburguesas. https://www.saborearte.com.mx/manjares-del-dia-a-dia-hamburguesas-al-carbon/

Impuestos y salud pública

  • Se requiere coordinación intersectorial y  mayor  educación nutricional 
  • Obesidad un fenómeno multifactorial

Como parte de los esfuerzos para frenar la epidemia del sobrepeso y la obesidad, se ha puesto enfoque en gravar las bebidas y alimentos que se perciben como asociados con esta enfermedad multifactorial y se ha comprobado que el aumento a los impuestos reduce, de alguna manera, el consumo de estos productos.

Sin embargo, una investigación difundida por la editorial londinense Dovepress, del grupo Taylor & Francis, señala que los resultados de disminución de peso, Índice de Masa Corporal y obesidad no son estadísticamente significativos solamente por el aumento de impuestos. (1)

El éxito de estas políticas requiere coordinación intersectorial, educación nutricional y transparencia en la asignación de los ingresos. Sin un enfoque multidisciplinario, el impuesto a alimentos y bebidas azucaradas corre el riesgo de convertirse en una decisión controvertida que simplemente funcione como mecanismo recaudatorio, refiere una investigación publicada por la plataforma ResearchGate, consultada por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO). (2)

La explicación se encuentra en un fenómeno llamado inelasticidad: que es simplemente cuando un producto –incluso con precios más altos– mantiene su nivel de consumo y preferencia.  A ello se suma la limitada transparencia sobre el destino de los ingresos recaudados sin evidencia clara de reinversión en salud pública. (3)

En nuestro país, la propuesta fiscal para 2026, vía el proyecto de Ley de Ingresos, plantea un incremento considerable en los impuestos a productos con alto contenido calórico. 

Según este proyecto, las bebidas azucaradas duplicarán su cuota del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), al pasar de 1.6451 a 3.0818 pesos por litro (casi el doble) e impactando en el precio final al consumidor. A ello se suma también la inclusión de los edulcorantes dentro del esquema impositivo, al considerarse su uso en diversas formulaciones industriales de bebidas procesadas. 

Dicho ajuste fiscal se aproxima al umbral recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que sugiere gravámenes de hasta 20 % para desalentar el consumo de productos con alto contenido de azúcar, aunque afirma que este tipo de impuestos debe ir acompañado de políticas complementarias para lograr transformar de manera sostenida los hábitos de salud de la población. (4)

Un informe del Banco Mundial refiere que desde 2014 el caso mexicano ofrece resultados mixtos: durante el primer año del impuesto a las bebidas azucaradas, las compras cayeron 6 %; en el segundo, 9.7 %, con reducciones más marcadas en hogares de bajos ingresos. Pese a ello, la recaudación por IEPS no petrolero —que incluye estos productos— se estabilizó y siguió creciendo, de acuerdo con el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP). (5)

Aunado a ello, diversos especialistas sostienen que la obesidad es un fenómeno complejo en el que inciden factores genéticos, ambientales, emocionales, sociales, así como el entorno, y que demanda diversas acciones de los gobiernos y de la sociedad en su conjunto, más allá del alza de impuestos a alimentos, bebidas azucaradas y productos que contienen edulcorantes bajos en calorías o sin calorías.  

Fuentes

  1. Maniadakis N, Kapaki V, Damianidi L, Kourlaba G. A systematic review of the effectiveness of taxes on nonalcoholic beverages and high-in-fat foods as a means to prevent obesity trends. Clinicoecon Outcomes. https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC3810203/?utm_source=
  2. The effectiveness of sugar tax in controlling sugar consumption June 2025. https://www.researchgate.net/publication/393150620_The_effectiveness_of_sugar_tax_in_controlling_sugar_consumption
  3. Tello, X. (2025, 10 de septiembre). Impuesto a refrescos es recaudatorio; no está destinado a salud. W Radio México. https://wradio.com.mx/2025/09/10/impuesto-a-refrescos-es-recaudatorio-no-esta-destinado-a-salud-xavier-tello/
  4. World Health Organization. (2023). Global report on the use of sugar-sweetened beverage taxes to reduce noncommunicable diseases.World Health Organization.  https://hpfhub.info/wp-content/uploads/2023/12/Global-Report-on-the-Use-of-Sugar-Sweetened-Beverage-Taxes-WHO-2023.pdf
  5. Maldonado, N., Ozer, C., & Veillard, J. (2025). Reformando los impuestos saludables para mejorar la salud en México (Notas de Conocimiento en Impuestos Saludables #8). Banco Mundial. https://documents1.worldbank.org/curated/en/099082725115554902/pdf/P179882-e26d15c9-2912-4b34-93a8-7a3598c19e54.pdf#:~:text=impuesto%20llev%C3%B3%20a%20que%20los,y%20el%20az%C3%BAcar%20de%20las
    Ortiz Gallardo, M. A. (2014, 3 de septiembre). La recaudación del IEPS No Petrolero. Centro de Investigación Económica y Presupuestaria. https://ciep.mx/la-recaudacion-del-ieps-no-petrolero/#:~:text=En%20la%20Ley%20de%20Ingresos,toxicidad%20aguda%2C%20el%20cual%20oscila

Hasta 5 kg se pueden aumentar durante fiestas patrias

  • Consumo en exceso de grasas y calorías  incrementa niveles de colesterol, triglicéridos y azúcar en la sangre

Durante los festejos de las fiestas patrias en nuestro país, una persona promedio podría subir hasta 5 kilos de peso, ya que —según especialistas—, la abundancia de comida, así como el exceso de calorías y grasas, contribuyen al desarrollo del sobrepeso y la obesidad.

Asimismo, comer sin medida este tipo de alimentos puede aumentar los niveles de colesterol, triglicéridos y azúcar en la sangre, además de causar indigestión, pesadez o incluso náuseas. Los principales desencadenantes de estos malestares son los alimentos grasosos, carbonatados, el alcohol y las aguas frescas muy azucaradas, así como ingerirlos demasiado rápido. (1)

En estas festividades, los principales alimentos que prefieren las y los mexicanos, señala un estudio elaborado por la agencia de investigación de mercados Kantar, consultado por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), son el pozole con 82%; tamales 47%; pambazos 36%; antojitos callejeros (elotes, churros y chicharrones) 29% y chiles en nogada 26%. 

Por lo que respecta al consumo de bebidas alcohólicas durante estas celebraciones, se reporta un aumento de entre un 30 y 40%, refiere la Central Mexicana de Servicios Generales de Alcohólicos Anómimos(AA), destacando que, por ejemplo, en la Ciudad de México, los capitalinos ingieren más bebidas alcohólicas en estos días que en el resto del año.

Y de acuerdo a proyecciones de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), para este 2025, el gasto aproximado por familia para la celebración en casa ascenderá a 6,000 pesos, lo que representa un aumento significativo con respecto al año anterior. 

Sin embargo, es importante mencionar que en México, aproximadamente 7 de cada 10 adultos tienen sobrepeso u obesidad, toda vez que la prevalencia de obesidad en adultos es de 37.1% y de sobrepeso 37.4%, según datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua 2020-2023 (Ensanut). (2)

De tal suerte que médicos y nutriólogos recomiendan cuidar la calidad de los alimentos y el tamaño de las porciones; reducir el consumo de grasas, empanizados, capeados, cremas y alimentos fritos; hidratarse constantemente; beber aguas frescas sin azúcar y moderar el consumo de bebidas alcohólicas y refrescos; comer despacio y mantenerse en movimiento, para no dejar de disfrutar y compartir con familiares y amigos estas fechas tan significativas.

Fuentes

  1. Gob.mx Comer en exceso en las fiestas patrias. https://www.gob.mx/salud/prensa/comer-en-exceso-en-las-fiestas-patrias-puede-provocar-complicaciones-de-salud#:~:text=Las%20tostadas%20y%20pambazos%20deben,a%20cabo%20las%20actividades%20escolares.
  2. SS. Sabías que 7 de cada 10 adultos padecen sobrepeso u obesidad. https://www.gob.mx/salud/articulos/sabias-que-7-de-cada-10-adultos-padecen-sobrepeso-u-obesidad#:~:text=En%20M%C3%A9xico%2C%20siete%20de%20cada,ni%C3%B1os%20tienen%20sobrepeso%20u%20obesidad y
    ENSANUT. INSP. Obesidad en adultos. https://ensanut.insp.mx/encuestas/ensanutcontinua2023/doctos/analiticos/15863-Texto%20del%20art%C3%ADculo-82493-2-10-20240821.pdf

¡Más agua, menos peso!

  • Inadecuada hidratación se asocia con mayor IMC, sobrepeso y obesidad

Sin duda, el agua es una aliada en la lucha contra la obesidad, puede ayudar a reducir el apetito y la ingesta calórica. Diversos especialistas han encontrado una asociación significativa entre una inadecuada hidratación y el Índice de Masa Corporal (IMC) elevado, lo que puede favorecer el desarrollo de sobrepeso y obesidad.

La falta de agua en el organismo puede producir lipólisis, que consiste en la descomposición de triglicéridos (grasa almacenada) para generar energía, toda vez que en condiciones de deshidratación, el cuerpo encuentra más dificultad para acceder a su reserva lipídica y tiende a utilizar carbohidratos como fuente principal, lo que limita la quema de grasa. (1) 

La deshidratación también afecta el equilibrio hormonal, ya que el cuerpo interpreta la falta de agua como una situación de estrés y eleva los niveles de cortisol, una hormona que promueve el almacenamiento de grasa, especialmente en la zona abdominal y reduce masa muscular. (2)

Y según un artículo publicado en el sitio web de la Universidad Abierta de Cataluña (UOC), consultado por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), otro efecto negativo del déficit hídrico en el cuerpo humano es la alteración en la percepción del apetito, ya que el hipotálamo, que regula tanto la sed como el hambre, puede confundir estas señales, provocando antojos o sensación de hambre cuando en realidad lo que el cuerpo necesita es agua. 

La regulación del peso corporal es un proceso complejo, y el aumento de la ingesta de agua debe ser parte de las medidas necesarias para reducir los factores de riesgo generales y el desarrollo de enfermedades crónicas como diabetes, cáncer y Alzhéimer, refiere un análisis presentado por la revista especializada Frontiers in Nutrition.

Asimismo, de acuerdo al Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), no beber la cantidad suficiente de agua provoca en nuestro cuerpo una serie de malestares ocasionados por pequeños estados de deshidratación, como: dolor de cabeza, fatiga y debilidad, mareos, cambios de humor, calambres y dolores musculares.

Los expertos recomiendan para un adulto promedio y saludable, una ingesta diaria de líquidos de: 3.7 litros para los hombres y 2.7 litros para las mujeres, aprox. (Se estima que el 20% de la ingesta de líquidos diaria suele provenir de los alimentos y el resto de las bebidas).

Además, se sugiere tomar agua al levantarse, durante el transcurso del día y cada vez que se tenga sed, lo que permitirá que nuestro organismo funcione armónicamente, obtenga beneficios en la digestión, y luzca saludable. (3)

Fuentes

  1. Stat Pearls. Bioquímica lipolisis.  https://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK560564/  https://www.medicalnewstoday.com/articles/322296
  2. Pub Med. Stress-induced cortisol response and fat distribution in women. https://www.health.com/cortisol-belly-8606192
  3. Mayo Clinic. Nutrición y comida saludable. https://www.mayoclinic.org/es/healthy-lifestyle/nutrition-and-healthy-eating/in-depth/water/art-20044256

Genética influye en el desarrollo de la obesidad

  • Expertos señalan que entre el 60% y el 70% de los casos responden a este factor
  • Las y los mexicanos presentan alta predisposición genética para desarrollar sobrepeso y obesidad

Aunque los cambios en el estilo de vida y la alimentación son factores determinantes, la ciencia ha demostrado que la predisposición genética tiene un papel crucial en el desarrollo del sobrepeso y la obesidad. Se calcula que entre el 60% y el 70% de los casos responden a este factor. (1)

El endocrinólogo Márcio Marcini, de la Universidad de Sao Paulo, en Brasil, señala que “la genética tiene una enorme influencia tanto en la génesis de la obesidad como en el proceso de pérdida de peso”, y destaca que el ambiente es muy importante para quienes tienen predisposición a ganar peso. 

Asimismo, el especialista considera que los genes influyen en varios procesos del cuerpo, lo que puede hacer que tengamos más ganas de comer alimentos grasos o que nos dé pereza hacer ejercicio. 

Por su parte, una investigación publicada en la revista científica brasileña Nutrição, consultada por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), refiere que varios estudios demuestran claramente la participación del componente genético en la incidencia de la obesidad, toda vez que se estima que entre el 40% y el 70% de la variación del fenotipo asociado a la obesidad tiene un carácter hereditario, y la influencia genética como causa de la obesidad puede manifestarse a través de cambios en el apetito o en el gasto energético. (2)

De tal forma que la herencia constituye también un factor determinante en algunas enfermedades y un elemento de riesgo para desarrollar diabetes, osteoporosis, hipertensión, cáncer u obesidad, añade. 

Además, precisa que el aumento de la prevalencia de la obesidad en casi todos los países en los últimos años parece indicar que existe una predisposición o susceptibilidad genética a la obesidad, sobre la que actúan también factores  ambientales relacionados con los estilos de vida.

Por su parte, un artículo publicado por National Geographic puntualiza que algunos científicos han descubierto que las mutaciones genéticas que hacen que una persona se sienta menos saciada después de comer pueden ser más comunes de lo que se pensaba, lo que lleva a quienes portan estas variantes a comer con más frecuencia o a consumir más alimentos ricos en calorías. (3)

De acuerdo con investigadores de la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMN) y el Instituto Nacional de Medicina Genómica, la población mexicana presenta una alta predisposición genética para desarrollar sobrepeso y obesidad, y a generar, en consecuencia, enfermedades crónicas y sus complicaciones metabólicas. (4) 

Cabe destacar que según datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua (Ensanut), entre 2020 y 2023, en México, la prevalencia de obesidad en adultos fue de 37.1%. (5)

Fuentes

  1. Jornal USP. Las estimaciones muestran que la genética. https://jornal.usp.br/atualidades/estimativa-mostra-que-genetica-pode-ser-responsavel-por-cerca-de-60-dos-casos-de-obesidade/
  2. Aspectos genéticos da obesidade. Revista de Nutrição.  https://www.scielo.br/j/rn/a/KLBxpVqvzWWxFr3YVG5x7CH/
  3. National Geographic. ¿Qué papel desempeña la genética en la obesidad? https://www.nationalgeographic.es/ciencia/2023/05/obesidad-genetica-implicacion
  4. UNAM. Facultad de Química. Presenta población mexicana alta predisposición genética hacia sobrepeso y obesidad. https://quimica.unam.mx/presenta-poblacion-mexicana-alta-predisposicion-genetica-hacia-sobrepeso-y-obesidad/
  5. ENSANUT. INSP. Obesidad en adultos. https://ensanut.insp.mx/encuestas/ensanutcontinua2023/doctos/analiticos/15863-Texto%20del%20art%C3%ADculo-82493-2-10-20240821.pdf

En las fiestas decembrinas se puede aumentar hasta 5 kg de peso

  • Segundo país en AL en el que más se gasta en esta temporada.

Durante la temporada decembrina, el consumo de alimentos con exceso de calorías y grasas suele incrementarse y en estas fiestas se puede aumentar entre 3 y 5 kilogramos en promedio, según datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). (1)

México es el segundo país en América Latina, después de Chile, en el que más se gasta durante las fiestas navideñas y de fin de año. El presupuesto promedio asignado para los gastos en estas festividades, incluyendo comida, ropa nueva para la ocasión y regalos se estima en 368 dólares por persona. (2)

Una encuesta de 2023, realizada por el Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE), consultada por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), reveló que las y los mexicanos destinaron en diciembre más cantidad de dinero a la cena navideña (58%) que a otros rubros, y entre los principales platillos que se consumen se encuentran: pavo (29%), tamales (14%), pierna de cerdo (10%), pollo rostizado o relleno (7%), y ensalada de manzana (7%). (3)

Cabe destacar que en nuestro país se consumen cada año, en esta temporada, más de 3 millones de pavos y en lo que corresponde a la carne de cerdo, la importación de pierna sube hasta 140%. En cuanto a las bebidas alcohólicas, tan solo del 24 al 31 de diciembre una familia destina, en promedio, 46% del gasto en las mismas. (4)

Sin embargo, el consumo en exceso de carbohidratos, grasas, sodio y alcohol contribuyen al sobrepeso y obesidad y en consecuencia a desarrollar trastornos metabólicos, resistencia a la insulina, elevados niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre, así como hipertensión. (5) 

Según datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua (Ensanut) 2020-2023, en el país la prevalencia de obesidad en adultos fue de 37.1%, la cual fue significativamente mayor en mujeres y en el grupo de 40 a 59 años. (6)

De tal suerte que los médicos y nutriólogos recomiendan que para mantener o cuidar el peso corporal es importante servirse porciones más pequeñas, aumentar el consumo de frutas o verduras, mantenerse hidratado, optar por alimentos con menos grasas, así como postres o dulces navideños sin alto contenido de azúcar, disminuir el consumo de alcohol, tratar de reducir el estrés y evitar comer muy tarde. 

Fuentes

  1. IMSS. Hasta cinco kilos de peso se puede aumentar en las fiestas de fin de año. https://www.imss.gob.mx/prensa/archivo/201712/393
  2. Statista. ¿En qué país de América Latina se gasta más en Navidad? https://es.statista.com/grafico/20276/gasto-promedio-per-capita-en-navidad-en-latinoamerica/
  3. Gabinete de Comunicación Estratégica. Navidad 2023. https://gabinete.mx/images/reportes/2023/sociales/Rep_Navidad_2023.pdf
  4. Unión Nacional de Avicultores. Para esta Navidad. https://una.org.mx/pavo_para-esta-navidad-2021/#:~:text=Para%20estas%20fiestas%20decembrinas%2C%20el,la%20Uni%C3%B3n%20Nacional%20de%20Avicultores.
    Porcicultura. La importación de piernas de cerdo para la cena navideña. https://www.porcicultura.com/destacado/La-importacion-de-piernas-de-cerdo-para-la-cena-navidena-rebasa-a-la-produccion-nacional
    Kantar. ¿En qiué gastan los mexicanos en diciembre? https://www.kantarworldpanel.com/mx/Noticias-/En-que-gastan-los-mexicanos-en-diciembre
  5. UNAM. Alimentación para la salud. Efectos del consumo excesivo de hdratos de carbono y grasa. https://alimentacionysalud.unam.mx/efecto-del-consumo-excesivo-de-hidratos-de-carbono-y-grasa-en-el-metabolismo-de-carbohidratos/
  6. ENSANUT Continua 2020-2023. Obesidad en adultos.  https://ensanut.insp.mx/encuestas/ensanutcontinua2023/doctos/analiticos/15863-Texto%20del%20art%C3%ADculo-82493-2-10-20240821.pdf

Uso en exceso de dispositivos electrónicos fomenta sedentarismo en menores

  • 59.7% de los niños de 6 a 11 años en México, usuarios frecuentes de internet

Uno de los principales impactos por el uso prolongado de dispositivos electrónicos es un estilo de vida sedentario, lo que puede contribuir al sobrepeso, la obesidad y otros problemas de salud. Y cabe destacar que 59.7% de los niños de 6 a 11 años, en nuestro país, son usuarios frecuentes de internet.  (1) 

En México 97 millones de personas usan internet, es decir, 81.2% de la población de 6 años o más; en tanto que 97.2 millones (81.4%) utilizan un teléfono celular, de acuerdo con una encuesta realizada, en 2023, por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en colaboración con el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT). 

Aproximadamente 16.9 millones de hogares dispone de computadora (laptop, tablet o de escritorio), y se estima que 34.9 millones de hogares cuentan con al menos un televisor.  (2)

Las pautas para niños menores de cinco años publicadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y consultadas por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), subrayan que “los comportamientos sedentarios, ya sea usar un transporte motorizado en lugar de andar o ir en bicicleta, estar sentado en el pupitre en la escuela, ver la televisión o jugar con pantallas son cada vez más predominantes y están asociados con la mala salud de los infantes”. (3)

Asimismo, usar por un tiempo excesivo los dispositivos móviles puede ocasionar problemas de postura; exponer a los menores a contenidos categorizados como “potencialmente peligrosos”; causar dificultades de atención y concentración, retraso en el desarrollo del lenguaje; aislamiento social y trastornos del sueño, refiere un artículo publicado en el sitio del Neurocentro – Recuperación Funcional, de Tenerife, España. (4)

De tal suerte que los expertos aseguran que si bien, el uso moderado y supervisado de estos aparatos promueve el conocimiento, el aprendizaje y la participación social, es importante limitar en las y los niños el tiempo de uso diario.

Según los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2020-2023, la prevalencia de sobrepeso y obesidad fue de 37% en escolares y de 40% en adolescentes y se estima que existen 542 mil niñas y niños mexicanos que viven con diabetes tipo 1 y casi 78 mil infantes la desarrollan cada año. (5)

Fuentes

  1. UNAM. La tecnología en la niñez puede fomentar también la creatividad. https://www.gaceta.unam.mx/la-tecnologia-en-la-ninez-puede-fomentar-tambien-la-creatividad/
  2. INEGI. IFT. Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2023. https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/boletines/2024/ENDUTIH/ENDUTIH_23.pdf
  3. ONU. Recomiendan que los niños no usen pantallas hasta los dos años. https://news.un.org/es/story/2019/04/1454801
  4. Neurocentro. Impacto negativo del uso de dispositivos digitales en el desarrollo de niños y niñas. https://neuro-centro.com/uso-de-dispositivos-digitales-e-impacto-negativo-en-el-desarrollo-de-los-ninos-y-ninas/#
  5. INSP. Resultados de la Ensanut 2020-2023. https://www.insp.mx/avisos/presentan-resultados-de-la-ensanut-2020-2023
    Centro Médico ABC. Diabetes infantil. https://centromedicoabc.com/revista-digital/diabetes-infantil-segunda-enfermedad-mas-comun-entre-los-ninos/#:~:text=En%20nuestro%20pa%C3%ADs%20existen%20542,cifra%20ascendi%C3%B3%20a%202.9%20casos

A nivel mundial, consumimos 200% más de sodio de lo recomendado

  • Carnes procesadas, botanas saladas y quesos: alimentos con mayor cantidad de sodio

Actualmente, en el mundo, consumimos un 200% más de sodio de lo recomendado y, a ese ritmo, no se alcanzará el objetivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de reducir la ingesta de sodio en un 30% para 2025, pues se calcula un consumo promedio, a nivel global, de 10.8 gramos de sal al día. (1)

Los alimentos procesados y ultraprocesados contienen mezclas de aditivos con diferentes funciones tecnológicas, siendo el sodio una de las principales sustancias utilizadas con fines de conservación y potencialización del sabor. 

Un análisis de especialistas del Centro de Investigación en Nutrición y Salud, consultado por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), en el que se recolectó información de 18,558 etiquetas de alimentos y bebidas empaquetados disponibles en supermercados de México durante 2017, refiere que además del cloruro de sodio (sal), los aditivos que más se utilizan para sodio son benzoato de sodio y bicarbonato de sodio. 

Asimismo, destaca que los alimentos que contienen más sodio son las carnes procesadas, las botanas saladas y los quesos, y que del total de alimentos y bebidas empaquetados disponibles en el mercado mexicano, 62.6% contienen alguna fuente de este ingrediente. (2)

También, existen un gran número de alimentos cuyo sabor predominante es dulce, pero que en realidad tienen un alto contenido de sodio, como los panes y las galletas, afirma el Consejo Argentino sobre Seguridad de Alimentos y Nutrición. 

Diversos especialistas destacan que exceder el consumo de sodio en la dieta diaria es un factor de riesgo para desarrollar enfermedades como hipertensión arterial, problemas cardiovasculares, accidente cerebrovascular, insuficiencia renal e incluso cáncer gástrico o colorrectal. (3)

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) considera que el cumplimiento de políticas obligatorias de reducción de sodio podría salvar unos siete millones de vidas en todo el mundo de aquí a 2030.

En México, la hipertensión se encuentra presente en más del 40% de la población adulta, de los cuales casi el 50% desconoce que padece esta enfermedad. Y las enfermedades cardiovasculares fueron la principal causa de muerte en 2019, al contribuir con el 23% del total de los fallecimientos. (4)

Profesionales de la salud recomiendan a las personas mayores que padecen hipertensión, adoptar una dieta baja en sal (o sin sal, dependiendo de sus necesidades), por lo que es importante conocer cuáles alimentos la tienen en mayor cantidad, cómo reducir su consumo y qué otros condimentos se pueden utilizar para darle sabor a la comida. 

Fuentes

  1. UN. Una pizca de sal. https://news.un.org/es/story/2023/03/1519247
  2. ALAN. Principales fuentes y contenidos de sodio en alimentos y…https://www.alanrevista.org/ediciones/2021/suplemento-1/art-81/#:~:text=Los%20grupos%20de%20alimentos%20que,743%20mg%2F100%20g
  3. IMSS. Consumo excesivo de sodio… https://www.imss.gob.mx/prensa/archivo/201911/486
  4. INSP. Consumo de sal/sodio en México y experiencias en Latinoamérica. https://insp.mx/resources/images/stories/2022/docs/220317_Consumo_de_sal_sodio_Mexico.pdf

La obesidad sí se “contagia”: Fernando de León

  • La familia, los amigos, redes sociales o la pareja pueden influir en la posibilidad de padecer esta condición.

Un mecanismo de imitación para ser aceptado entre nuestros diferentes grupos sociales en los que mayoritariamente haya personas con sobrepeso puede influir en las probabilidades para adquirir esa misma condición, sostuvo el licenciado en Nutrición, Fernando de León, en entrevista exclusiva con el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO).

El especialista explicó que si alguien se rodea de personas con determinadas características puede haber cierta imitación de conductas. Por ejemplo, el caso de las y los adolescentes, quienes van creciendo y creando relaciones sociales fuertes con la gente que conviven (amigos, compañeros de clase o la propia familia) y la influencia que pueden provocar esas compañías, en este caso, en la forma de alimentarse o los hábitos que desarrollan día con día, en la convivencia habitual.

Esto sucede también —agregó—, cuando prevalecen los antojos o la comodidad, más que el interés por mantener una dieta saludable; o ante la presión social y la persuasión de optar por alimentos que no contribuyen con el plan dietético.

Asimismo, recalcó que la obesidad se puede desarrollar por diversos factores, pero principalmente hay tres que se deben tomar en consideración: la mala alimentación, la poca o nula actividad física y la falta de control del estrés.

“No debemos creer todo lo que dicen los influencers o dejarse llevar por mitos o recomendaciones de gente que no es experta; el tipo de dieta o la prescripción de algunos medicamentos siempre deben indicarse por profesionales y dependiendo de las características de cada persona, para tener un diagnóstico correcto, un análisis más preciso sobre los diversos factores y ver cuál es el método ideal para alcanzar los mejores resultados”

Fernando de León

Sin duda, dijo, la alimentación es uno de los aspectos más importantes en el tema del sobrepeso y la obesidad; para que una persona aumente de peso tienen que ver mucho los hábitos, por ejemplo, el consumo excesivo de azúcares, grasas saturadas y carbohidratos, pero esta enfermedad no se da únicamente por la cantidad o el tipo de alimentos que se ingieren, “también hay otros factores, como la ansiedad, el atracón, la depresión o el estrés”. 

Y mencionó que la obesidad se puede manifestar de diferentes formas: en la forma de respirar; el estrés; la forma de dormir, incluso a algunos les da apnea del sueño; o en el desarrollo de algunas enfermedades crónicas, como la diabetes o la hipertensión, aunque no a todos les pasa lo mismo.

Sin embargo, afirmó, hay que poner mucha atención cuando una persona tiene sobrepeso u obesidad, porque ello le puede ocasionar además, afectaciones en las rodillas o articulaciones; insomnio; depresión; problemas de tipo renal o hepático, así como disminuir el deseo sexual, baja probabilidad de tener un hijo o, en el caso de las mujeres, cuestiones de tipo hormonal, por mencionar algunos.

Para evitar el desarrollo de esta enfermedad, el experto recomendó tratar de controlar el estrés; cambiar paulatinamente los hábitos en general que le condujeron a ese estado: dormir mejor, beber más agua, hacer ejercicio, sentirse bien con uno mismo (darse algún tipo de aliciente, como comprarse ropa), y preferir una dieta saludable, disminuyendo el consumo de los carbohidratos, grasas y azúcares, lo que no significa eliminarlos de la dieta, sino cuidar las porciones.

Para reducir los altos índices de sobrepeso y obesidad, señaló que es conveniente estar “bien informados”, tomando en cuenta que en la actualidad hay muchas fuentes confiables. 

“No debemos creer todo lo que dicen los influencers o dejarse llevar por mitos o recomendaciones de gente que no es experta; el tipo de dieta o la prescripción de algunos medicamentos siempre deben indicarse por profesionales y dependiendo de las características de cada persona, para tener un diagnóstico correcto, un análisis más preciso sobre los diversos factores y ver cuál es el método ideal para alcanzar los mejores resultados”, finalizó.

¿Qué tan efectivos son los nuevos medicamentos para bajar de peso?

  • Aminoran el apetito y ayudan a controlar el azúcar en la sangre.
  • Todavía son costosos y no aptos para todas las personas.

Diversos especialistas señalan la efectividad de los nuevos fármacos que permiten a las personas con sobrepeso u obesidad bajar hasta en un 20% su peso y de acuerdo con una publicación de Harvard Medical School, consultada por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), destacan: semaglutida (Wegovy), liraglutida (Saxenda) y tirzepatida (Zepbound). (1)

Estos medicamentos, que imitan una hormona (péptido similar al glucagón 1) que ayuda al cuerpo a ralentizar el vaciado del estómago, controlar los niveles de azúcar en sangre y suprimir el apetito -afirman los expertos-, mejoran además, la capacidad para hacer ejercicio y por ende la calidad de vida.

“Pueden incluso afectar el centro de recompensa del cerebro, la parte que te permite comer pastel de chocolate aunque estés lleno; lo que también puede disminuir las conductas adictivas como los antojos de alcohol, azúcar y nicotina”, sostiene la Dra. Carolina Apovian, especialista del Centro para el Control de Peso y el Bienestar del Brigham and Women’s Hospital. 

Han demostrado que pueden reducir significativamente el riesgo de muerte, por causas relacionadas con el corazón en personas con sobrepeso u obesidad, así como con enfermedades cardíacas (o enfermedades cardíacas y diabetes, según el medicamento). 

Respecto a cómo se toman dichos fármacos, cabe destacar que la mayoría se presentan en forma de inyecciones que se aplican a diario o semanalmente. Se introducen en un inyector que se presiona contra el abdomen o el muslo. Hasta el momento, los medicamentos están aprobados para la pérdida de peso únicamente en personas con diagnóstico de obesidad (Índice de Masa Corporal de 30 o más) o un rango superior de sobrepeso (IMC de 27 a 29,9), así como un problema médico relacionado con el exceso de peso, como presión arterial alta o colesterol alto. 

En marzo de este año, en Estados Unidos, se anunció que su programa de seguro médico gubernamental, Medicare, cubrirá esta nueva clase de medicamentos contra la obesidad –incluidos Wegovy y Ozempic (semaglutida)– para pacientes con riesgo de sufrir un derrame cerebral o un ataque cardíaco. 

El precio de lista de Wegovy, por ejemplo, es de alrededor de 16 mil 200 dólares por un suministro de un año. Estos costos tan elevados, para muchas personas, han llevado a que se discuta en ese país, sobre los beneficios a largo plazo y la justificación para pagar ese gasto con dinero de los contribuyentes. (2)

Asimismo, el acceso a este tipo de medicamentos aprobados por la Agencia norteamericana de Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés) requiere la supervisión de un profesional médico.

En México, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) advirtió sobre el riesgo de automedicación. “El consumo sin supervisión médica de semaglutida y liraglutida puede causar daño renal, estreñimiento, mareos, taquicardia, infecciones y dolor de cabeza”. (3)

Por su parte la FDA y el Centro de Información de Medicamentos de la Universidad de Córdoba, España, han dado a conocer reportes de farmacovigilancia en los que se notifica que algunos pacientes a quienes se suministraron medicamentos agonistas del receptor GLP-1 (fármacos para la diabetes y pérdida de peso) “desarrollaron pensamientos suicidas y conductas autolesivas”.

Ante la polémica que han causado estos nuevos medicamentos para controlar el sobrepeso y la obesidad, se siguen llevando a cabo intensos estudios y se espera que en los próximos años se modifiquen las recomendaciones sobre quiénes deberían utilizarlos y cómo. Es muy probable que se identifiquen nuevos grupos de personas que podrían beneficiarse de ellos o, por el contrario, personas que podrían correr un riesgo mayor de sufrir efectos secundarios a causa de su uso.

Cabe señalar que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad es una enfermedad crónica que impacta de manera negativa en la vida de quien la padece, y que puede provocar resistencia a la insulina, hipertensión y dislipidemia, al tiempo que está asociada con complicaciones como diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares. (4)

Fuentes

  1. Questions and answers about the new anti-obesity medications. Harvard. https://www.health.harvard.edu/staying-healthy/questions-and-answers-about-the-new-anti-obesity-medications
  2. Can Ozempic be a breakthrough drug and overpriced at the same time?. VOX https://www.vox.com/future-perfect/2024/4/3/24119220/ozempic-wegovy-weight-loss-medicare-coverage-price
  3. Cofepris advierte sobre riesgos de automedicación con fármacos para bajar de peso: se asocia con depresión e ideas suicidas. Cofepris. https://www.gob.mx/cofepris/articulos/cofepris-advierte-sobre-riesgos-de-automedicacion-con-farmacos-para-bajar-de-peso-se-asocia-con-depresion-e-ideas-suicidas
  4. Obesity and overweight. OMS. https://www.who.int/news-room/fact-sheets/detail/obesity-and-overweight
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